TeamViewer tiene tres funcionalidades integradas para permitir que el usuario acceda a una computadora remota. Son control remoto, transferencia de archivos y VPN (si el controlador está disponible). Ninguna de estas funciones tiene el modo oculto y, de nuevo, ninguna de ellas le permite al usuario remoto ver o administrar su computadora sin que se dé cuenta. Veo tres posibles ataques aquí:
- Si todos los controladores necesarios están instalados (el usuario remoto también puede instalarlo), puede desactivar la pantalla y bloquear el teclado para hacer cosas sucias sin que usted lo vea, pero no sin darse cuenta. Todo lo que tiene que hacer es enchufar el cable de red o el cable de alimentación, lo que lo detendrá.
- El usuario remoto puede conectar su computadora con la función de transferencia de archivos. Sin embargo, cuando se establezca la conexión, verá una ventana emergente que le permite ver qué usuarios remotos están viendo, copiando o eliminando. Si no es cuidadoso, puede instalar malware o cambiar los archivos de su visor de equipo por otros malvados.
- Si el controlador VPN de TeamViewer está instalado y activo, el usuario remoto puede ingresar a su red doméstica utilizando su computadora como puente. Si sus dispositivos de red tienen contraseñas predeterminadas o débiles, el atacante puede cambiar sus direcciones DNS (o, lo que es peor, reenviar todo el tráfico a su propia red) para obtener y alterar sus solicitudes de DNS. Puede usar esta técnica para redirigirle a un sitio web de phishing y robar su información.
Todas estas técnicas son inútiles si eres lo suficientemente cuidadoso. La primera y la segunda técnica no se pueden lograr sin que te des cuenta. Si no ha instalado el controlador VPN para TeamViewer (que se puede deshabilitar desde su red y centro de uso compartido), tampoco hay nada de qué preocuparse con el tercero.
Si eres lo suficientemente cuidadoso, nadie puede hackearte con TeamViewer.