La policía en la mayoría de los países (si no todos) obedece a varias leyes de investigación y marcos legales claros que determinan lo que están autorizados a hacer, cómo, cuándo, etc.
Por lo general, para interceptar una comunicación, un oficial de policía debe obtener la aprobación de una autoridad judicial (por ejemplo, un juez independiente).
Puede haber excepciones a esas reglas en caso de investigaciones específicas y / o cuando hay urgencia de actuar (p. ej., terrorismo o un delito que se cometerá pronto), pero nuevamente esos casos están bien definidos en la ley para evitar el abuso / mal uso por parte de las autoridades.
Todos los procedimientos administrativos, trámites, aprobaciones, autorizaciones, etc. deben seguirse estrictamente para que el tribunal pueda recibir las pruebas.