WebGL permite el acceso al canal de GL a sus núcleos de GPU. Algunos fabricantes integran GPU directamente en el chip de la CPU. Esto permite que la GPU comparta la memoria interna de la CPU, en lugar de tener su propia memoria, como es el caso con conjuntos de chips de gráficos externos. Este es un riesgo potencial para la seguridad de la información.
Los procesadores paralelos que consumen mucha energía, como las GPU, también son ideales para aplicaciones de criptografía.
Hay muchos ejemplos de bitminers basados en webgl en botnets. Si bien no son una amenaza para la seguridad de la información (a la inversa, los bitminers son la base para la seguridad de la información de la cadena de bloques), estas botnets roban una asombrosa cantidad de energía de las vastas redes de dispositivos involuntarios en los que se ejecutan.
Esto significa que Bitcoin tiene una huella de carbono creciente pero en gran parte oculta, lo que es una amenaza potencial para la seguridad ambiental.
Si alguna vez observa que algunos sitios web ralentizan su pantalla sin aumentar la carga de la CPU, es muy probable que estén ejecutando el código webgl en su GPU. También una causa probable de los misteriosos drenajes de energía de dispositivos móviles.
Las aplicaciones móviles (como los navegadores web) pueden ejecutar el código de GPU permanentemente en segundo plano, y pueden requerir un reinicio del dispositivo para detenerlos.